Estuve en un circo donde había enanos de un metro ochenta, equilibristas desequilibrados, payasos tristes, magos sin sorpresas, mujeres barbudas depiladas y hombres “bala” bien machos.
Más tarde fui al zoológico. Allí me encontré jirafas de cuellos reducidos por caníbales del África, canguros sin bolsas, alces sin cuernos, monos que no trepan y un elefante con alas que libaba rosas con tallos sin espinas.
Mientras recorría la ciudad me encontré con gente muy mal de la cabeza, hablaban de locos que disparaban en el medio de las avenidas hiriendo y matando a personas. Comentaban acerca de un gobierno que hace unos años pedía que los periodistas destaparan la olla de la corrupción y hoy, que están en el poder, les exigen que se callen. Atentados a embajadas y a mutuales nunca resueltos. Pibes secuestrados y asesinados sin que se sepa quién fue. Desaparecidos nunca aparecidos. Aparecidos jamás desaparecidos. Abuelos maltratados, torturados y asesinados en su propia casa por jóvenes en busca de las pocas monedas que les quedan. El resto de los abuelos cobrando limosna como jubilación. Hospitales públicos impúdicos. Villas de emergencia. Cartoneros en las calles peleando por las sobras y pibes de cinco años, faltando al colegio, y pidiendo plata mientras tratan de limpiar parabrisas.
La ciudad estallaba en llamas ante la nieve que caía en forma de gotas de fuego. Fuego que helaba mi sangre, congelaba mi sentidos. La lluvia que caía con la nieve secaba mis lágrimas al fundirse en mis mejillas y yo, en el medio del caos, te soñaba. Me fui al río y al sumergirme en sus aguas saladas, sentí que el dulzor me invadía. Descubrí sirenas malabaristas que con sus colas de pez, hacían malabares en los semáforos de los submarinos. El pez chico se comía al grande y en la panza de un gigante vivía una ballena. Continué mi periplo sin dejar de imaginarte y, más allá, de las rudezas y las rarezas, tus sentidos invocaban a los míos mientras danzaban en el vientre de las algas y a merced de un cielo salpicado de estrellas marinas que giraban en una rueda mágica de colores y de amores.
Entonces me subí a un tren. Allí, entre pasajeros que le vendían su dinero a vendedores ambulantes y mendigos cómodamente sentados, a cambio de alguna estampita, varios pares de medias o un auricular “directo de su importador”. Allí, decía, me encontré con mi soledad, después de cruzar un par de palabras con ella la acompañé a la puerta en la siguiente estación. Luego me crucé con mi odio, lo amé tanto en tan poco tiempo que tuvo que bajarse resignado. Con mi egoísmo compartí lo poco que me quedaba y huyó. A mi tacañería le mostré las facturas de compra por mi buena vida. A mi silencio le pegué cuatro gritos. A mi rencor lo perdoné. A mi orgullo lo humillé. A mi ausencia le dije: “Presente”.
Uno a uno se me fueron presentando todos estos seres “respetables” y, a cada uno de ellos, les fui mostrando mi irrespetuosidad.
Pero el mayor nivel de rarezas lo hallé cuando tomé un colectivo. Allí me encontré con mujeres que agradecían con una gran sonrisa a los caballeros que las dejaban subir primero. Hombres a los cuales no los invadía el “Virus del sueño” al ver que subía una mujer embarazada o alguna señora mayor. Me encontré la pareja de novios que, después de haber estado en la fila de espera durante 15 minutos, tenían las monedas en la mano listas para sacar boleto sin detener el ascenso de los demás pasajeros (Cabe aclarar que en estos casos, siempre tiene las monedas el que se fue a sentar al fondo del colectivo y no el que se queda con la máquina). Supe de conductores que sabían arreglar las máquinas expendedoras de boletos y no dejaban a los pasajeros en la calle por culpa del: “máquina fuera de servicio”. Esto ya era el colmo de las rarezas, mi respiración se tornó agitada, el pecho se me empezó a cerrar, me ahogaba y ya, casi no podía respirar.
Imaginé el vendaval de tu pollera cayendo desde tu cintura. El torrente de tus medias rasgándose muy despacio. Sentí que los payasos, las medusas, las ballenas, los magos, los colectiveros, los pasajeros del tren, la soledad, los elefantes, mi orgullo, las sirenas, los peces chicos, los grandes, los asesinos, los gobernantes, las jirafas, los monos y todos, no eran nada ni nadie en el “arrabal de tus caderas”. Soñé que no estabas conmigo, soñé que me habías abandonado, soñé que mi cuerpo no era el mío en el tuyo. La verdad y la mentira se me confundían y vos, me saludabas de lejos. No podía distinguir si ibas o venías. Todo se mezclaba y el corazón que me estallaba y la transpiración que me embriagaba; me agitaba impaciente en mi centro y el aroma del café de la mañana. Y la brisa de tu aliento en mi oído. Y tu sonrisa “espantamiedos”. Y yo al fin despierto con la confusión eterna de un sueño mal parido y la certeza de tu presencia alrededor de tu ombligo.
Fernando A. Narvaez
La pintura es de Goya – El Sueño de la Razón
Update 16/07/06: Sólo es para agradecer a la autora del MSN Spaces: OjosDeMiradaCuriosa por citar un post mío en su blog. Es muy honroso de que esto suceda. MIL GRACIAS
julio 10, 2006 at 12:03 pm
uy!
yo quisiera una de esas jirafas (me fascinan esos animales).
decime… ¿dónde es que quedaba este circo?
😛
julio 10, 2006 at 1:14 pm
El Teatro de las sombras era el palacio jamás visto por el ojo humano, ¡solo para locos!…
Había malabaritas ciegos, ángeles trapecistas, polichinelas que eran los abogados de las causas del Diablo…
Gemí al ver tantos antifaces idólatras al renegar de tantos arlequines con mofas, títeres de poca monta, calaveras obesas, y cadáveres con grandes pócimas del veneno de la juventud, todo era apeticible en el teatro de las sombras, evité ver el rostro del fantasma de la ópera, el que de tanto sabor a blasfemia, hizo los compases más intensos en mis vértebras…
julio 10, 2006 at 3:39 pm
interesante el elefante…
(me quedo imaginando a cada uno)
hay mas?
julio 10, 2006 at 4:02 pm
Bendita la mágia de sus ojos que le permiten ver esas rarezas, para después plasmarlas aqui con sus suaves palabras.
Besos imaginarios 🙂
julio 10, 2006 at 4:13 pm
Los elefantes no eran rosas????
julio 10, 2006 at 10:27 pm
Tallos sin espinas? A mi nunca me gustó la flor como elemento mundano que se regala, siempre me pareció despojarla de su esencia, de su raíz… pero de esas que decís vos, quiero una para conservar, así, desnuda, y sin resistencia.
besos fer!
julio 10, 2006 at 11:37 pm
ARWËN: Si si… es justito a dos kilómetros de la Rotonda de Alpargatas. BESAZO
RAPHAELA-ANGEL: Gracias por pasar, lástima que no me citó a la autora. BESO
MARIAN: Mañana en su Duendecanal. BESOTAZO
PRINCESA: Usted lo llama magia de mis ojos, otros, sin dudarlo lo calificarían de haber estado mucho tiempo bajo el efecto de ciertos estupefacientes alucinógenos. BESOTOTE
TA: Esa es una rama que viene del desierto de las dunas de los volcanes ubicados al oeste de los alpes orientales sureños de la llanura septentrional del mar Bordó que está más allá de la llanura meridional de los alpes norteños occidentales, justo al este de los volcanes de dunas en el desierto de Mar de las Pampas. Igual, acá no se habló del color de los elefantes. BESOTE
JULIETA: ¡Pero! Mírese en el espejo y la tendrá. BESOTOTE
julio 11, 2006 at 1:19 am
Don Duendeeeeee!!! Esta modalidad de posts sigue la máxima del artista de siempre dejar al público con ganas de más.
Volveré para leer cómo siguen estas rarezas =)
Un beso!
julio 11, 2006 at 7:48 am
UY yo que soy payasa, se que hay momentos de tristeza..así aprender a valorar cada una de las alegrías…el mundo al revés según tus ojos..genial, besos su
julio 11, 2006 at 9:42 am
Y si, lamentablemente el mundo real, aquel que nos mostraba las cosas simples y bellas ha sido cambiado por extravagancias que sólo atraen almas perdidas.
julio 11, 2006 at 11:25 am
EMMA: ¿Máxima del artista? Es la mínima del Duende que no se le cae una idea entera. BESOTÓN
SUSANA: Es que conociendo las miserias valoramos las dichas. BESAZO
SO: ¿A quién se refiere con «aquel»? BESORROTAZO
julio 11, 2006 at 2:56 pm
es dura la realidad que retratás, quedo a la espera de la siguiente entrega.
Abrazos
julio 11, 2006 at 5:28 pm
Sin querer..o queriendo…la realidad supera a doña ficcion…aunque no se hable del color de los elefantes ni de los asesinos…
Yo tambien lo quiero
Abrazo a ud y cia
julio 12, 2006 at 8:37 am
¿todos tan hermosos y malditos no?
tóca una rumba, pero de las q tumban a un ganador, peso pesado y campeon
julio 12, 2006 at 12:49 pm
«Arlequines y payasos, este circo es un fracaso, ya no me hace sonreir…»
Así escribió hace tiempo el gordo Otero, cuando todavía rockeaba y hoy es lo primero que me viene a la cabeza al mirar los noticieros.
Abrazo.-
PS: Todavía me debe la crítica de «Ruido a Vidrios»
julio 12, 2006 at 6:41 pm
Esto si que se está poniendo lindo!
julio 12, 2006 at 10:37 pm
Impecable Fer…adelante!
julio 13, 2006 at 12:51 am
Maravillosa premisa, para que todos jueguen.
Su creatividad, sin limites.
Sobe
julio 13, 2006 at 11:39 am
JORGE: Lamentablemente esa parte que usted me comenta es real. ABRAZÓN
TA: A veces me siento en una gran película de terror. BESOS
IMAX(G)INATE: Jamás mejor resumidos. Gracias por recordarme a Enrique. ABRAZAZO
ROMAU: Noticieros tristes los de ayer. Ya me imprimo su cuento y pido disculpas ABRAZÓN
MARIAN: ¡Ya seguimos, ya! BESOTAZO
SO: Vamos por más. BOSOTÓN
MALENA: Juguemos entonces. SOBE
julio 13, 2006 at 12:50 pm
…la imaginación…gra consuelo…para sumergirnos y apartarnos de este día a día…e intentar soñar…con el pasado como hoy, como presente, con ese que se fue a mi lado, con el mar rojo y la luna azul, el sol al anochecer y el amanecer de arcoiris….si pudiesemos jugar con este mundo, vida, planeta….sin duda visitaria continuamente mi pasado…pero más vale que me concentre y vuelva a donde estoy…el trabajo espera, los pagos pendientes, la agenda con vida, la casa, el perro con hambre….y la vida andando asi que más vale que yo pare e andar alucinando…
julio 13, 2006 at 12:54 pm
AZUL: Primero decirle que ¡qué bueno tenerla de vuelta por acá! En cuanto al resto, tiene razón tenemos muchas cosas mundanas por hacer. Pero por favor, no dejemos jamás la imaginación de lado. BESAZO
julio 13, 2006 at 5:21 pm
¿Nos vas a dejar así? ¿Cómo sigue? Veo que has cambiado la plantilla. 🙂
julio 13, 2006 at 5:33 pm
Nuestra realidad , nuestra ciudad, nuestra gente, nuestro dolor, nuestra impotencia, nuestro grito… estoy en esos lugares… Un beso
julio 14, 2006 at 1:58 am
ANA: Noooo, ya continúa, no se desespere. En cuanto a la plantilla… la cambio a cada rato. BESOS
Ç: Tanto nuestro que somos nosotros mismos. BESAZO
julio 14, 2006 at 10:04 am
¿Pudiste dormir al final? Espero que sí.
julio 14, 2006 at 10:15 am
ANA: Costo bastante le diré, pero si. Lo logré. Gracias y BESAZOS
julio 14, 2006 at 4:05 pm
si tu angel no te hubiera llevado de su mano hacia me recién estrenado blog (llevo varios) (ah, y no es verdad que los duendes lo asusten, sólo quiere que lo mimes), me hubiera quedado sin saber que la letra de mi post era de quien es.
pero lo peor… tampoco hubiera conocido tu lugar, que es magnífico.
es que a mí me rigen los duendes, (hago duendes), y son un poco…
en fin.
gracias.
me encantó el relato.
julio 14, 2006 at 5:29 pm
Vaya!!! pensé que solo en mi país se salía a la calle y encontrabas cosas así. Al parecer el mal es común y se extiende como un gran cancer social.
Abrazo Felino Y por cierto, casí se me olvida, me alegra leerte de regreso.
julio 14, 2006 at 9:23 pm
Siempre contamos con una mirada onìrica, narcolèpsica de las cosas, quizà para no caer en ese mundo para el que no estamos hechos, Bendito.
Coincido con quien habla de su mirada, irremediablemente.
Le dejo un besototerre que siga contando con alas.
Un abrazo de fin de semana.
Un placer leerlo.Gracias.
julio 14, 2006 at 10:59 pm
MOM: Las «causalidades» me han llevado a muy bellos sitios y de los otros. Gracias pro venir por acá. BESAZOS
GATTO: La alegría es mía de saberlo por acá. ¡SALUD!
UMA: Y usted viene y me habla difícil. No importa, yo la quiero igual. Ando escaso de besos asía que le dejo sólo un BESORROTAZO
julio 15, 2006 at 4:16 am
Fernando, hacía rato que cabalgaba por tus praderas. Enhorabuena !
Abrazo tanguero, apretado y de frente.
julio 15, 2006 at 5:58 am
Veo que acabaste la historia. 🙂 El final me recuerda a una canción de Mike and the Mechanics (a ver si busco el CD y te digo cuál) en la que él dice que el mundo está lleno de violencia y va poniendo ejemplos, pero lo mejor es que en esa noche en que no puede dormir, al alargar la mano está ella al lado.
julio 15, 2006 at 6:48 pm
Muy sugestivo final…me gustó!
Besos, SO.
julio 15, 2006 at 10:38 pm
JOSÉ FRANCISCO: Gracias por su paso al trote. ¡SALUD!
ANA: Es que en este mundo tan programado no se puede ser demasiado original. No conzco el tema, avíseme de su título. BESAZO
SO: ¿A qué se refiere con «sugestivo»? Ja! Broma. Gracias por cada todo. BESOTAZO
julio 16, 2006 at 2:28 am
Ud sabe que le salio espectacular este texto? que salvando algunas semejanzas con otros …suyos claro…es bien diferente….y por eso…me encanta…le dicen versatilidad…le dicen…poder dibujarla bien…le dicen..meterce en el baile y bailar…y a ud..querido Fer te salieron muy bien las figuras(llamese vulgarmente a los pasos dibujados entre giros y maniobras de pareja en cualquier danza de a dos)
y me colgue….
Pero por suerte de tu s palabras….
abracios
julio 16, 2006 at 4:52 am
Fernando; sólo el que está arriba, conoce a su cabalgadura.
Abrazo tangero, apretado y de frente.
julio 16, 2006 at 9:37 am
TAM: ¡Yo no sé bailar! BESO
JOSÉ FRANCISCO: Si no fuera porque es domingo y son como las 9 de la mañana, juraría que me está queriendo decir algo. ABRAZÓN
julio 16, 2006 at 3:15 pm
Pero su compañera SI!!!!!!!!
Asi que por «compañia directa» ud baila…sin querer…
Un abrazotazo
julio 16, 2006 at 4:06 pm
buenas tardes desde España
le envió mis más cordiales saludos, para mi fué una gratísima sopresa conocerle, y que escribiera tan lindas palabras… es para mi un honor que me haya visitado en mi space.
mis mejores deseos y fructíferas creaciones
OjosdeMiradaCuriosa 🙂
julio 17, 2006 at 3:52 pm
He estado buscando la canción que te dije en YouTube, para ponértela en mi blog, pero parece ser que no está. Así que, te digo el título: «Something to Believe in» (Algo en lo que creer) de Mike and the Mechanics, el CD era «Beggar on a Beach of Gold». Ya te pondré la traducción al español en mi blog un día de estos, pues me dijiste que el inglés no lo dominas mucho, sólo si es bajito y se deja, como en el chiste aquel:
-¿Usted domina el inglés?
-¿Yo? Si es bajito y se deja…
julio 17, 2006 at 7:28 pm
TAM: ¡No quiero! ¡No quiero! ¡No quiero! BESO
OJOSDEMIRADACURIOSA: Quise agradecerle en su Space, pero no me permitía cometar. De veras que me halaga, espero volver a verla por acá. BESAZO
ANA: ¡Agendado! Ya la buscaré y si me pone la traducción mucho mejor. BESOTAZOS.